El proceso pedagógico de enseñanza y aprendizaje,  no se concreta con la presencia del profesor como guía y los estudiantes como receptores del conocimiento resumido en textos, cuadros, mapas y otras prácticas,  ya que con anterioridad  se .hace la planificación  muy bien elaborada, con los objetivos  que se pretende alcanzar, para obtener resultados satisfactorios. En todo el proceso puede surgir un mensaje subrepticio, que el emisor no siempre lo capta y se lo expresa en las gesticulaciones, los movimientos del cuerpo, la mirada, el tono de voz y el lenguaje verbal, reflejando los estados anímicos de la persona, que se traslucen en la comunicación del emisor, que puede agradar o desconcertar al receptor si el mensaje es de imposición aprendida en el hogar, con carga de frustración o ira, que puede ser determinante en los resultados del proceso de aprendizaje. Normalmente el niño es curioso, inquieto, cuestionador y si no tiene la experiencia de subestimación o mal trato, puede protestar ante lo que le parece injusto. En cambio si sufre malos tratos de parte de sus padres, la forma de expresarse del profesor puede influir en su reactividad psicológica y someterse a la autoridad o rebelarse negándose  a cumplir las normas,  despreocupándose  de los objetivos que el profesor plantea en su enseñanza.  Las palabras no puedes, no debes, eres muy lerdo, nunca presentas tu trabajo, tonto y la constante descalificación a su esfuerzo limita sus posibilidades de aprender, al contrario de la interconexión empática que produce el estímulo verbal, la utilización de códigos asertivos,  el control reflexivo de las palabras, del cuerpo, de la cara, del tono, etc, que son alicientes para poder madurar en el proceso de perfeccionamiento del conocimiento.  La mayoría de los estudiantes tienen aversión a los métodos de enseñanza del sabelotodo o al método tradicional, que está muy relacionado con el poder o dominio, y aunque no se rebelan, tampoco asumen su responsabilidad con pro actividad y son los menos los que muestran entusiasmo por destacar no en notas, sino en la adquisición del conocimiento.

Ya en el siglo 18, según Foucault, en el Simposio del 23 al 28 de marzo de 1998 en Sevilla, España, donde participaron Juan Freires,  Juango Muñoz, Leo Ruffine, Tiscar Lara, Jesús Martín barbero, teórico comunicador,  se analizó la educación en Latino América y se llegó a la conclusión que era necesario transformar la enseñanza y se propuso la educación expansiva, porque había una crisis educativa que estaba afectando a la familia, a la política, al Estado, a la economía,al no integrarse los saberes comparen el aula, ya que no existía relación entre el Saber Científico, Saber Oficial, Lenguajes Poéticos, Lenguaje de los Sentidos, Lenguaje Corporal, Experiencia Social, para contar las propias historias, porque las ideas no están concentradas. No hay una crítica literaria que incentive el intento de pensar, ya que los liberales y los ilustrados conviven pero no defienden sus ideas. Las horas en aula no le sirven al estudiante para  su desenvolvimiento laboral, porque tienen que pasar muchos años,  para comprender lo que se requiere para ser eficiente. La educación se castró, con procesos fuera de lugar y no hay una clara respuesta para influenciar en la inteligencia colectiva.

Hoy se debe instruir  fuera del lugar de estudio, fuera de la escuela. Con este criterio plantean que la educación expansiva es un método de enseñanza que permite al estudiante hacer práctica la información teórica, con la vida. Utilizar el método donde las preguntas,  son base de la investigación,  para comprobarlas en el mundo circundante,  en constante comparación, y que en este ritmo de aprendizaje aprenda a lidiar con los obstáculos, a obtener respuestas,  compartir  con personas de diferentes condiciones sociales, con diferentes formas de pensar, con profesionales de su área y de otras áreas, con la única herramienta que posee,  como medio de inter conexión, que es el lenguaje verbal,  escrito o presentado en forma audiovisual.

El problema para ofertar esta enseñanza, es la administración de las instituciones, que no pueden llevar el control, para saber el tiempo que utiliza el docente para enseñar,  ya que el producto debe ser revisado y comprobado,  de acuerdo a las expectativas de los planes,  que se plantea en su  proyecto.   Y un maestro no podría elegir horarios que le convengan, sino trabajar en horarios establecidos por la institución, para estar en constante servicio hacia el educando.  Por eso este método no ha sido reconocido,  como propuesta educativa, aunque por los resultados obtenidos como experiencia, se ha podido comprobar que forma profesionales autónomos, críticos, responsables y comprometidos con el Desarrollo Humano.   Por estas limitaciones administrativas,  este método puede ser experimentado en forma mixta, incentivando a que  el estudiante aproveche su curiosidad, sus cuestionamientos, su inquietud para explorar la realidad del mundo, compararla con las teorías que analiza, y con sus interrogantes profundice  las temáticas que debe saber,  para  su carrera,  poniendo énfasis en las preguntas y exposiciones que plantea, exigidas por el docente, conocer las teorías, analizarlas y refutarlas en discusiones en aula, con la misma seriedad, profundidad y conocimiento con la que el estudiante defiende su tesis.  Este siglo es de los saberes compartidos y de la producción de conocimientos fuera del aula, para que los intelectuales piensen a largo plazo. Se deben generar nuevos enfoques metodológicos, nuevos conocimientos, con la oportunidad que da la tecnología. El libro es lineal de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo y se ha desfasado el interés de leer, por los modos como se comunican hoy las sociedades.

El aula no es democrática, el modelo de educación también es lineal y no se logra la interactuación entre el conocimiento y lo que sucede en la  vida. El conocimiento no se adquiere ni se imparte, sino que se lo produce y se lo transmite.